Después de mucho tiempo sin escribir en el blog, no por falta de ganas sino de tiempo, he decidido que ya es hora de retomarlo.
Dentro de un ratito asistiré a la 2ª convocatoria de la Comisión de Conciertos en la Delegación de Educación y este año se procedera a la renovación de los conciertos. A fecha de hoy no sabemos los criterios técnicos que la Admón va a tener en cuenta a la hora de proceder a su renovación, solo contamos con las declaraciones que han hecho sus responsables a los medios de comunicación....Me comprometo que al final de la misma hacer un resumen de lo acontecido.
Dicho esto, hay un tema que estamos dándole mucha vuelta desde el AMPA. Me explico, allá por el mes de octubre una madre me manda un e-mail con un enlace a la pag we de la Consejería de Educación y me pregunta ¿Qué es esto del plan de la cultura emprendedora?. Como si hubiese sido una chispa lo del Plan ya hizo ponerme en alerta y provoco que indagara un poquito más. ¿Por qué esta reacción?.
Un Plan por definición es un instrumento de planificación, donde después de un análisis de una situación, en el caso de las Admón, social, económica y política se proponen mejorar algo mediante la definición de unos objetivos y de unas acciones muy concretas. Pues aquí ya tenía curiosidad de conocer el análisis publicado en la web de la Consejería.
1º punto: curiosidad por conocer el análisis ¿sobre qué?
Otro motivo que me llevo a curiosear, uno muy elemental: por mi experiencia se que una Ley la aprueba un Parlamento, pero que en principio hay que esperar su desarrollo normativo y no siempre viene acompañada de presupuesto en cambio, un Plan es un instrumento administrativo aprobado por el ejecutivo, en el que se va concretando líneas de acciones para conseguir un objetivo y que siempre viene con “pasta”.
2º punto ¿cuánta pasta? y ¿para qué?.
Los Planes estratégicos aprobados por la Admón tienen un ser, emanan de algún lado. Y como aquí todo sabemos vamos cortito de dinero con esto de la crisis, las neuronas me dirigieron a la AGENDA 2020 y como además el plan cuenta con dinero, ese dinero tiene que venir de Europa y como todo lo que viene de Europa es para financiar actuaciones. Y todo lo que es financiar aquí se traduce en SUBVENCIONES.
3º punto: ¿qué es lo que se va a subvencionar?
Y ya para terminar como una es muy mala intencionada, me fui directamente al preámbulo del Plan, es como la exposición de motivos de una Ley y es lo que hay que leer con más detenimiento, y ¡!!!bingo lo encontre!!!, la VII CONCERTACIÓN SOCIAL.
Es decir, ese Plan tenía que hablar de educación, de subvenciones y sindicatos y patronales.
Hace tiempo llego a mi mano un documento realizado por la Universidad, tipo prontuario, en que se recogía instrucciones de cómo darle valor a las cosas. Entonces me estremecí. En mi inocencia yo creía entender que las cosas buenas tenían valor por si misma y que las malas no. Nunca pense que una cosa buena tuviera un valor, de cuanto de ¿7? Y que las cosas malas tampoco. Luego comprobé que esto es la práctica habitual de los que ejercen el poder, poner valor a las cosas para justificar las acciones de promoción, fomento,... y que van acompañadas con subvenciones.
Por eso cada vez que escucho PLAN veo una gran caja negra, oscura ante los ojos de la ciudadanía, pero que tiene mucha intencionalidad no tanto para cambiar las cosas, porque estariamos hablando de colaboración y participación, sino de negocio.
Ahora me tengo que ir. Prometo continuar con la reflexión.
